El control de la temperatura es un factor clave para el rendimiento y la vida útil del motor. Los ventiladores tradicionales funcionan generalmente a una velocidad fija, sin poder adaptarse a la temperatura del motor. Esto no solo provoca un consumo innecesario de energía, sino que también puede resultar en una refrigeración insuficiente bajo altas cargas, causando sobrecalentamiento y un desgaste prematuro de los componentes.
El acoplamiento viscoso con aceite de silicona utiliza la regulación inteligente por temperatura, combinando las propiedades reológicas del aceite de silicona con el diseño del acoplamiento para ajustar la velocidad del ventilador según las necesidades de refrigeración. Cuando la temperatura del motor aumenta, la viscosidad del aceite de silicona se incrementa, transmitiendo más par y acelerando el ventilador. En condiciones de baja temperatura o carga ligera, el ventilador reduce su velocidad o se desacopla parcialmente, evitando así pérdidas energéticas innecesarias.
En comparación con las soluciones mecánicas convencionales, la tecnología con aceite de silicona ofrece ventajas claras:
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Refrigeración eficiente: velocidad del ventilador ajustada a la demanda, temperatura óptima del motor en todo momento.
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Ahorro energético: evita un funcionamiento continuo a altas revoluciones, reduce la carga del motor y mejora la economía de combustible.
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Mayor vida útil: menor estrés térmico, menos desgaste y menores costes de mantenimiento y sustitución.
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Funcionamiento más silencioso: evita el ruido de un ventilador girando siempre a alta velocidad, ofreciendo mayor confort de conducción.
Elegir un acoplamiento viscoso con aceite de silicona no solo significa actualizar el sistema de refrigeración, sino también invertir en la fiabilidad y durabilidad a largo plazo del motor.
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